La lactancia Materna tiene múltiples beneficios
PARA CADA BEBÉ
La leche materna le ofrece a cada bebé en desarrollo, un alimento nutritivo, accesible, y que ayuda a protegerle del síndrome de muerte súbita. La incidencia de diarrea es de 3 a 14 veces mayor en bebés alimentados(as) con biberón cuando se comparan con los(as) amamantados(as). Además, los(as) bebés que reciben leche materna producen mayores niveles de anticuerpos como respuesta a las inmunizaciones infantiles.
Los y las bebés amamantadas tienen un riesgo menor de adquirir infecciones del tracto urinario.
La lactancia materna ayuda a prevenir la diarrea, incluyendo eczema, alergias hacia los alimentos y respiratorias, tanto en la niñez como en la adolescen-cia.
La composición de la leche materna cambia en una simple comida y va transformándose conforme avanza el proceso de lactación, mientras que las fórmulas siempre se mantienen uniformes (Jensen et al. Handbook of Milk Composition, 1995: 836).
PARA LAS MUJERES
La lactancia materna es un placer especial para las madres y para sus bebés. También ofrece beneficios a largo plazo para las madres que amamantan: la lactancia reduce el riesgo de cáncer de seno y de ovarios, de anemia y de osteoporosis.
La lactancia materna exclusiva ayuda al esparcimiento entre embarazos, dándole a la mujer tiempo para recuperarse del parto, y así poder cuidar a sus bebés y a contribuir a la seguridad alimentaria de la comunidad y del hogar.
PARA LAS FAMILIAS
La alimentación artificial puede consumir de un 20% a un 90% del ingreso familiar; a esto hay que añadirle los costos de tener que cuidar a niños(as) enfermos.
Todo(a) bebé, sus hermanos y hermanas y sus familiares se beneficiarán de la lactancia materna y podrán tener mejores oportunidades de acceso a una alimentación más nutritiva.
PARA LAS COMUNIDADES
La lactancia materna es un importante seguro cuando las familias sufren golpes y emergencias. En casi todos los países, ricos o pobres, los niños y niñas de familias de menores ingresos, tienden a ser menos amamantados(as). Sin embargo, podrían recibir el mejor alimento, el más accesible y nutritivo de todos, si recibieran la leche de pecho.
Las madres pueden estar seguras que cuando amamantan proveen la mejor alimentación. La madre lactante tiene el derecho a la mejor nutrición y la sociedad debe cumplir con la responsabilidad de brindársela.
«Invertir en la promoción de la lactancia materna es una de las intervenciones de salud con mejor costo-efecto disponibles» (Orton et a. 1996:165).
PARA EL AMBIENTE
La lactancia materna no produce desperdicio. Cada madre que amamanta reduce el problema de contaminación y de la disposición de basura. Mientras se amamanta no se necesita utilizar ni la tierra, ni el agua, ni metales, ni plásticos, ni combustible, ni utilizar dinero o depredar al medio ambiente. La lactancia materna ayuda a proteger a la naturaleza.
Para hacer las mezclas de leche en polvo, y esterilizar y lavar los biberones y tetinas, se utiliza mucha agua. Se necesitan aproximadamente 200g de madera para hervir un litro de agua; en un año un(a) bebé alimentado(a) artificialmente puede usar por lo menos 73 kilos de madera.